Fue hasta que el ministro de Gobernación, Carlos Menocal, le advirtiera a Velásquez que habían detectado un posible atentado en su contra, decidió entregarse, asegura.
El ex funcionario declaró ante los medios que en cuatro ocasiones se comunicó con Menocal, pese a estar prófugo, y que las autoridades sabían dónde se encontraba y nunca le hicieron nada.
"Yo nunca salí del país. No sé porqué no me agarraron", dijo.
Luego de ser destituido de la cartera, Velásquez se mantuvo prófugo y fue declarado en rebeldía.
Las declaraciones del ex ministro surgieron previo a la audiencia de primera declaración por el caso de las anomalías en la cárcel de Fraijanes, en el Juzgado Décimo de Instancia Penal.
Por el caso Fraijanes se le sindica de los delitos de estafa y conspiración para la estafa.
Más temprano fue escuchado ante dicha judicatura por el caso Maskana, por el que la jueza Verónica Galicia lo ligó a proceso y lo envió a prisión preventiva a la cárcel de Matamoros.
Los delitos por el caso Maskana son lavado de dinero, concusión, abuso de autoridad y conspiración para la concusión.
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