Una celda de máxima seguridad espera a Lima

El capitán Byron Lima Oliva tendrá que abandonar Pavoncito, el área que el ministro de Gobernación, Mauricio López Bonilla, llama la “zona de comodidad” del recluso. Ayer, la Cámara Penal resolvió que la decisión sobre su traslado le corresponde al Juzgado de Ejecución. El Ministerio Público (MP) solicitó que el militar sea transferido hacia la cárcel de máxima seguridad Fraijanes II.

El Juzgado Segundo de Ejecución autorizó el 18 de febrero el cambio que pidió el MP. El defensor de Lima, Moisés Galindo, cuestionó ese fallo, porque asegura que contradice la resolución del Juzgado de Turno, mediante la cual Lima quedó ligado a proceso por el delito de encubrimiento propio y que ordena que permanezca en esa cárcel. Según el defensor, no se puede anular el fallo del Juzgado de Turno. El cambio se ordenó luego de que las autoridades detectaron que el recluso salió de Pavoncito sin autorización judicial el pasado 15 de febrero.

“El Juzgado de Ejecución es el encargado de conocer todas las incidencias relacionadas con un reo que cumple una condena”, afirmó el presidente de la Cámara Penal, César Barrientos. Esa instancia conoció la resolución del traslado, luego de una duda planteada por el juez de ejecución penal. 

Cuando reciba el fallo de la Cámara, el Juzgado debe instruir a la Dirección General del Sistema Penitenciario sobre el traslado del recluso.

El defensor de Lima Oliva refirió que decidirá las acciones legales que deba presentar cuando tenga la resolución en sus manos.

Lima Oliva gozaba de privilegios en Pavoncito, según declaró López Bonilla.  Los permisos para salir del penal sin autorización judicial eran algunas de esas prebendas que le costaron el puesto al exdirector general del Sistema Penitenciario, Luis Alberto González.