Las preguntas surgen al calor del informe El Problema de las Drogas en las Américas, presentado por el secretario General de la OEA, José Miguel Insulza, el 17 de mayo en Colombia, y entregado el sábado al mandatario Otto Pérez Molina.
En el documento se plantea que “la despenalización del consumo de drogas debe ser considerada en la base de cualquier estrategia de salud pública”. Esta propuesta llevó consigo una oleada de reacciones que pilotaron entre calculadas manifestaciones de apoyo y duras críticas.
La agenda de la OEA podría centrarse en este aspecto, más que en estrategias alternativas contra el tráfico de drogas, tema propuesto por el canciller Luis Fernando Carrera, y calificado por él como “el eje central” de la Asamblea.
Pérez Molina considera que “lo más importante es hablar específicamente sobre la marihuana, sobre la cocaína, sobre la heroína, y lo que tenemos que hacer”.
Su preocupación es definir quién y cómo se le dará “seguimiento” al tema, sin “trasladarlo a otro organismo”, donde se podría perder lo logrado hasta ahora. “La propuesta de Guatemala y Colombia es que sean los jefes de Estado quienes continúen el análisis del tema”, dijo el mandatario durante una reunión con Insulza. El Secretario de la OEA indicó que la Asamblea no aprobará el informe, sólo “será discutido” para que los cancilleres de los Estados miembros definan quien le dará seguimiento.
¿Cuál es la agenda de Guatemala?
Más allá de las declaraciones oficiales y comunicados, las autoridades no han profundizado en la descripción de las aportaciones del Gobierno.
La propuesta del Canciller se queda en ideas generales. Carrera habla sobre el fortalecimiento del sistema de salud, combate al blanqueo y al tráfico de armas. Afirma que se propondría “analizar la opción de legalizar algunos cultivos” o “la posibilidad de descriminalizar el consumo”.
“No se tiene conocimiento de qué van a hablar, solo conjeturas. Los guatemaltecos estamos en ayunas en política internacional”, lamentó el abogado constitucionalista Gabriel Orellana.
La directora de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, Raquel Zelaya, cree que “el hilo conductor (de Guatemala) sería la revisión de la estrategia contra el narcotráfico”. Respecto del informe, consideró que aunque no cree que se alcance un acuerdo definitivo, sí surgirá una discusión.
El coordinador general del Instituto de Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, Edgar Gutiérrez, calificó de oportuna la presentación del informe. “Le da un buen marco al encuentro de las delegaciones. El debate sin duda ya incluirá aspectos que hasta hace un año eran impensables”, opinó Gutiérrez.
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